Una campaña para la conservación del patrimonio subacuático
La Consejería de Cultura, a través de la Dirección General de Bienes Culturales y con la colaboración del Centro Andaluz de Arqueología Subacuática (CAS), ha puesto en marcha una campaña de sensibilización para implicar a la sociedad en la conservación y protección del patrimonio subacuático.
La campaña consta de material informativo dirigida a los organismos portuarios, las asociaciones náuticas, buceadores y turistas, indicándoles los pasos a seguir en caso de un hallazgo casual en zonas marítimas, según ha informado Cultura.
La idea es concienciar a los ciudadanos de la fragilidad del patrimonio subacuático, sometido al grave problema del expolio y la destrucción, y de la necesidad de que la población colabore con las instituciones competentes en la materia.
Para eso se pide que ante un hallazgo casual -para lo que se recomienda no remover los restos o bienes hallados y comunicarlo de forma inmediata- se aporte información que consideren de interés para la protección de estos bienes.
Esta colaboración podrá hacerse a través del teléfono 956 20 33 94 -tal y como se indica en los folletos y carteles de la campaña informativa-, donde contactarán con profesionales del Centro Andaluz de Arqueología Subacuática.
Esta campaña de sensibilización forma parte del proyecto ARCHEOMED, en el que participan junto a España seis países, como son Italia, Francia, Portugal, Malta, Marruecos y Argelia.
Se trata de una iniciativa comunitaria Interreg IIIB MEDOCC creada con el fin de impulsar y desarrollar acciones encaminadas al estudio y puesta en valor del patrimonio cultural marítimo común en los países ribereños del Mediterráneo.
Entre sus objetivos figura la creación de una red estable entre las regiones; la puesta a punto de técnicas, instrumentos y metodologías de investigación no destructivas para el estudio, conservación y puesta en valor de los recursos culturales; la sensibilización a la ciudadanía y la formación de jóvenes investigadores.
(Fuente:Diario de Cádiz)
Una iniciativa loable, pero que debería de hacerse extensiva al patrimonio cultural terrestre, para informar a constructores, promotoras inmobiliarias, encargados del patrimonio cultural en manos de la iglesia, etc. Así, igual se evitaría la destrucción sistemática del patrimonio arqueológico con la excusa del desarrollo urbanístico -el mismo que nos ha metido en la crisis actual-, y la toma de conciencia de que la aparición de patrimonio cultural en las obras puede ser un valor añadido a los proyectos constructivos y no un impedimento.
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