¿Boxeo amateur o mal boxeo?



Llevo poco más de un año metido en esto del boxeo, con el veneno en la sangre, como dice mi entrenador y gran conocedor del deporte del cuadrilátero, pero creo que ya puedo hablar con conocimiento de causa sobre la situación del boxeo amateur en Andalucía.

Los entrenadores, la mayoría sin la formación adecuada -llevarse muchos golpes en la cabeza no garantiza ser buen entrenador-, con honrosas excepciones, llevan a las veladas a muchachos que no han recibido la formación adecuada. Lo único que llevan consigo es "muchos cojones" y tres golpes mal ejecutados, agresividad y fuerza, precisamente lo contrario de los que debe ser el boxeo amateur: gracilidad de movimientos, rápidos pensamientos para sacar manos efectivas y bellas en su ejecución, técnica y disciplina.  Todo esto se contagia al respetable, que salvo honrosas excepciones, repito, se comporta como si estuviera en un circo romano, expulsando hiel por sus bocas alcoholizadas (porque, como en los campos de fútbol del más rancio abolengo en 3ª regional, se sirve alcohol en un evento deportivo) e ignorantes de lo que significa "deporte de caballeros".



Es de loar cualquier iniciativa para promover este deporte, como las de D. Antonio de la Rosa, del Club Don Príncipe, pero hay que empezar a pulir las aristas del mundo que rodea a este deporte, estigmatizado por la leyenda negra de deporte de perdedores, de sonados de la cabeza, de frecuentadores de prostíbulos e ídolos con puños de acero y pies de barro, cual ángeles caídos. La federación que dirige, desde que el Generalísimo era de carne y hueso, y no estatua que remover de lugares públicos, el Sr. D. Alfonso Otero, reparte los presupuestos que le damos TODOS de dinero público y/o licencias deportivas, cual dádivas caprichosas, a su antojo, habiendo creado un sistema de clientela con centro neurálgico en Sevilla. El dinero de las licencias, al parecer para los seguros obligatorios de los practicantes de boxeo, se manda en sobres, existiendo ya hace tiempo unas cosas llamadas "cuentas corrientes" en las que ingresar el dinero, sin que lo sepa el Sr. Otero. ¿Para cuándo una auditoría en las cuentas de la Federación? ¿Para cuándo otra directiva?

En las veladas se permiten irregularidades en el pesaje de los boxeadores, irregularidades en el vestuario de los contendientes, boxeadores sin licencia, etc. Y el que quiera pruebas, que acuda a las veladas que organiza la Federación, con el presidente a la cabeza.
  
Como esto siga así, terminarán cargándose este noble deporte, y si no, al tiempo.

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