Trabajar es de tontos

"El trabajo cansa. Eso prueba que el hombre no está hecho para trabajar." 

Raymond Rogers

Ayer estuve pensando, aunque parezca mentira; a veces me pasa y pienso, sin querer. Me di cuenta de que trabajar es de tontos. Veamos un ejemplo:

Vamos por el campo y vemos a dos personas: una de ellas está con la azada destripando terrones, sudando la gota gorda bajo el sol; la otra está bajo un árbol, a la sombra, echando la siesta junto a una bota de vino vacia. ¿Cuál de los dos sería el listo? Exacto, el que está bajo el árbol, de lo cual se deduce que trabajar es de tontos. 

Mejor reconocerlo cuanto antes, porque las plazas de listos están ya cogidas por unos señores que heredaron la sombra del árbol de sus padres (reyes, aristócratas, políticos, etc); a nosotros nos toca la azada.

Me da lástima la gente que dice que seguiría trabajando en el caso de ser premiado con un bote de la Euromillones. Yo ya tengo mis planes al respecto, por si algun día me toca. Me haría arrancar las uñas de las manos, para no hacerme heridas de lo tanto que me iba a tocar los huevecillos. Mi trabajo sería dormir, y mi "hobby", soñar.

Otro caso práctico: 

¿A quién conocen ustedes que le guste trabajar sin cobrar? 

Y para terminar, una cita edificante para los que piensen que trabajar es lo máximo en sus vidas:

"El trabajo aleja tres grandes vicios: el aburrimiento, el vicio y la penuria."

François-Marie Arouet

Por eso debo de ser un tipo tan aburrido, vicioso y triste...