La Iglesia Católica británica pide que se disfracen los niños de santos en Halloween.
La Iglesia católica británica ha hecho un llamamiento a los niños a disfrazarse de santos en lugar de hacerlo de brujos o diablos en la popular fiesta de Halloween. San Jorge, Santa Lucía, San Francisco de Asís o Santa María Magdalena podrían ser elecciones muy populares para los niños, según la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales.
Me parece muy bien, pero creo que años de vivir rodeados de protestantes iconoclastas ha hecho perder el norte a la Conferencia Episcopal de la pérfida Albión. Recordemos algunos disfraces de santos que podrían tener mucho más éxito que los típicos de brujas, hombres lobo y vampiros...
1. Santa Lucía. Mientras era una joven decidió dedicar su vida a Cristo y se negó a casarse con el prometido que le había escogido su madre. Aunque ésta eventualmente acepto su decisión, su rechazado pretendiente no pensaba lo mismo y la denunció a las autoridades por ser cristiana. Intentando sin éxito convertirla en una prostituta, los soldados encontraban su cuerpo demasiado pesado e inmovible. Por esto y como castigo, fue torturada sacándole los ojos y luego, asesinada. La leyenda cuenta que Dios le devolvió la visión antes de morir.
Iconografía: como una joven sosteniendo sus ojos en una bandeja, y es la santa patrona de los problemas visuales y la ceguera.
Bonito disfraz este, ¿verdad?
2. Santa Agata. Gracias a ser una mujer hermosa, Santa Agata atrajo la atención de un juez poderoso llamado Quintianus. Cuando ella rechazo sus deshonestas proposiciones, él hizo que la enviaran a un prostíbulo. Ella oró, y luego de 30 días aún permanecía sin ser tocada. Quintianus entonces ordenó que fuera encadenada, golpeada con látigos, estirada sobre un potro de tormento y quemada. Durante estas torturas sus senos fueron cortados. La leyenda dice que San Pedro milagrosamente sanó sus heridas esa noche. El enfurecido Quintianus hizo luego que la colocaran sobre carbones en llamas y vidrios hasta que ella finalmente falleció. Ella es la santa patrona de las víctimas del cáncer de mama.
Iconografía: Descrita con sus senos sobre una bandeja.
Otro precioso disfraz, mucho mejor que una bruja. ¿Dónde va a ir a parar?
3. San Bartolomé. Uno de los apóstoles de Cristo. Luego de la muerte de Cristo, viajó por el mundo a lugares tan lejanos como la India, predicando el evangelio. Cayó víctima de los paganos en Armenia, donde el fue martirizado. La leyenda cuenta que fue despellejado con vida (le removieron toda la piel de su cuerpo sin matarlo y manteniéndola de la mejor forma), y luego lo crucificaron boca abajo. El es el santo al cual las personas involucradas con las pieles y el cuero invocan.
Iconografía: Descrito en el arte como un hombre quien sostiene una piel despellejada.
Otro fantástico disfraz para Halloween. Te presentas despellejado en una puerta para pedir caramelos y echas unas risas que no veas.
4. San Cristóbal. Pertenecía a una tribu del Norte del África llamada los Marmaritae. Esa área del mundo era desconocida en esa época y se consideraba habitada por toda clase de extrañas criaturas, incluyendo a hombres con cabeza de perro. Algunas leyendas que se contradicen hablan acerca de Cristóbal. En una, el santo tiene cabeza de perro, y es capturado por los romanos quienes lo obligan a servirles. Se convierte al cristianismo y, por consiguiente, en una figura única entre su grupo. Otra leyenda tiene a San Cristóbal cargando a un niño en sus brazos a través de un río, el cual comienza a volverse muy pesado a medida que avanzan. Otras leyendas afirman que Dios le otorgo el rostro de un perro para mantener alejada la atención de las mujeres.
Iconografía: Un hombre con cabeza de perro vestido en una bata lujosa. Un cinocéfalo.
Vamos, que estos señores de la Conferencia Episcopal británica no ven una estampita como es debido desde que Enrique VIII le dio boleto a Tomás Moro. Y podría seguir con un sinfín de representaciones cada cual más "gore", pero no tengo tiempo.
Comentarios
Publicar un comentario